Historia

Fue en Noruega. Allí comenzó todo. A -18º C. Esta es la historia de como se ideó Nomad Face y la necesidad de crear la marca de protección solar más extrema.

En esta casita de Hamnoy (Lofoten) es donde tuve la idea de desarrollar una línea de protectores solares para condiciones extremas.

TODO COMENZÓ EN NORUEGA

Los médicos fueron claros: nada de excesos. Nada de buscar límites y todo deporte en terrenos planos. Una lesión de rodilla me quitó la oportunidad de vivir condiciones más extremas. Había soñado subir grandes cimas. El Everest.

La fotografía me dio el equilibrio que había perdido. Si no podía subir montañas, debía de vivirlas aunque fuera desde la distancia. Mi primera parada: Islandia. Cambié el rumbo. Nada fue igual. Me enseñó lo que era la tierra, las auroras boreales y descubrí lo pequeño que era en ella. Y mi segunda parada: Noruega.

Un viaje fotográfico en condiciones extremas. Iba a llevar mi piel al límite. Olvidé cargar con una crema de protección solar. Al aterrizar fui al Duty free del aeropuerto de Oslo. Buscaba algo específico pues las previsiones eran de -18º. Sólo encontré cremas de protección solar de playa. Me pareció muy extraño. En Noruega, a -18º. Pregunté y me confirmaron que no había nada específico.

Ya en Bodo, las Islas Lofoten, recuerdo entrar en una tienda especializada de montaña. Pregunté por la protección más extrema y de nuevo la misma respuesta: no había nada específico para condiciones severas.

No había sido capaz de encontrar la mejor protección de la piel en sus temperaturas más extremas, de sol, frío y viento. Tan sólo pude encontrar productos de protección solar estándar. Productos fabricados para proteger la piel en verano.

Pero llegar a mi destino y saber que mi piel estaría expuesta a tal clima tan extremo, no me venía bien.

Soy un nómada de los viajes, sea cual sea el destino. Quiero poder disfrutar de los paisajes, tomar las mejores fotografías. Tras viajar por más de 60 países he llevado siempre mi piel al extremo. Y siempre he tenido claro que la seguridad y la protección es indispensable. Lo extremo no perdona.

Supe que había encontrado algo. Que debía darle algo a la tierra que tanto admiraba. No podía alcanzar mis cimas soñadas. No era capaz de subir las montañas más altas y disfrutar en las condiciones más extremas.

Era mi 1ª señal. Si yo no podía tenía que proteger al que sí lo hacía. Debía proteger a aquellos capaces de perseguir sus propios límites. De conquistar sus retos, de vivir aventuras.

Me interesé por descubrir más acerca el cuidado y la protección solar. Me pasé horas dedicándome al estudio.

Descubrí que la incidencia del sol es el responsable del 90% de los casos de cáncer de piel. Que cada 300 metros de altura el riesgo a quemarte es del 5%. A 3000m el riesgo a quemarte es del 50%. A 6000m, del 100%. Me sorprendió que aumentas en un 150% el impacto del sol en la nieve con respecto a la playa. Fue clave descubrir que 1 de cada 3 cánceres es de piel. El responsable del cáncer de piel, el más común, es el sol. En un 90%.

Mi padre murió de cáncer.

Esta fue mi 2ª señal. Es mi modo de honrarle. El mayor cuidado de la piel pasó a ser más que un objetivo. Era mi nueva meta. Mi futuro. Nació entonces, NOMAD FACE.

Hoy, protegemos la tierra del impacto humano. Y la piel de las personas del impacto del sol. No pongas límites a tu aventura de vida.

Victor